Después de haber ido a un restaurante japonés y haber tomado alguno de los comensales este tipo de berenjenas he probado a hacerlas y han quedado así, muy buenas.
Para dos personas:
Una berenjena.
Sal.
Aceite de girasol.
Para la salsa:
Aceite de oliva.
Soja dulce.
2 dientes de ajo.
1 cucharita de miel.
Sake o vino blanco.
Un poquito de jengibre.
Para el arroz blanco aromatizado:
arroz.
1 hoja de laurel.
Un trocito lima o limón.
Un saquito con especias, en este caso he puesto semillas de cilantro, u poquito (un trocito de un "pétalo") de anís estrellado, unos granos de pimientas variadas, un trocito de un palo de canela y unas hojas de orégano.
Cortamos la berenjena longitudinalmente y damos unos cortes, sin llegar a la piel, a cada una de las mitades, le echamos un poco de sal y la dejamos unos 15 minutos, pasados estos limpiamos el agua que haya salido.
En una sartén ponemos aceite no muy caliente y freímos la berenjena sin dorar (unos 5 minutos) por un lado y los mismos por el lado de la piel. Volvemos a poner las mitades de berenjena con la piel hacia arriba, tapamos y dejamos una media hora.
Al cabo de este tiempo las sacamos y las colocamos sobre una servilleta de papel.
Hacemos la salsa con los ingredientes que hemos dicho. También se puede hacer (más japonés) una salsa con miso, sake y miel o azúcar.
Yo he puesto la salsa en un recipiente aparte pero también se puede cubrir la berenjena con esta salsa (mejor con la de miso) y echar por encima unas semillas de sésamo.
